La grave escasez de trabajadores representa una amenaza existencial para el sector de cuidados a largo plazo (LTC) en los países de la OCDE, ya que tienen una fuerza laboral cada vez menor al mismo tiempo que su base de clientes está creciendo rápidamente. Para 2040, los empleadores necesitarán 13.5 millones de trabajadores de LTC adicionales para mantener la proporción actual de trabajadores de cuidado a personas mayores. Los cambios demográficos en curso han desempeñado un papel importante en este desarrollo. Si bien se espera que el número de personas de 80 años o más en los países de la OCDE alcance los 1.200 millones para 2050, sus poblaciones en edad de trabajar se están reduciendo drásticamente. Para los proveedores de LTC, esta tendencia demográfica plantea un doble desafío: a medida que las poblaciones envejecen, no solo habrá más personas mayores que necesiten atención adecuada, sino también menos personas en edad de trabajar para ocupar los puestos de trabajo. Los resultados del desafío continuo ya son evidentes: mientras que algunos proveedores se han visto obligados a cerrar sus puertas, otros tienen que limitar sus admisiones.
Los trabajadores extranjeros serán esenciales para la supervivencia del sector. La movilidad laboral de calidad puede ayudar parcialmente a los países de la OCDE a abordar la escasez de mano de obra en el sector de los CLD. Al mismo tiempo, la movilidad laboral ha demostrado traer una amplia gama de beneficios a los trabajadores extranjeros, sus familias, así como las economías de los países de origen. Y, sin embargo, menos de un puñado de países tienen canales apropiados para permitir que los trabajadores de cuidado de adultos se muden y trabajen en sus países.
Este evento exploró: cómo la movilidad laboral puede ayudar a aliviar la escasez de trabajadores y fortalecer la industria de LTC; la opinión del sector sobre la mejor manera de abordar la escasez perpetua de mano de obra; y, por último, cómo las asociaciones entre el sector del cuidado de las personas mayores, los países de origen y los proveedores de servicios de movilidad laboral pueden trabajar mejor juntos para defender, implementar y evaluar los programas de movilidad laboral ahora y en el futuro.